Addictware | Noticias de Tecnología - Plan de Recuperación de Desastres, vital para la continuidad del negocio

Existen soluciones y herramientas que garantizan total disponibilidad a las empresas para tener una buena resiliencia ante contingencias, enfrentar obstáculos y lograr recuperarse de desastres, continuando la operación de manera normal.

Jonathan Bourhis Veeam SoftwareEl mundo empresarial moderno demanda una garantía de disponibilidad 24/7/365 y es que hoy somos testigos del creciente volumen de datos generados y cómo las aplicaciones informáticas se vuelven de misión crítica de manera acelerada - actualmente es de 48% y se espera que para el 2018 sea de 52%, segun el Reporte de Disponibilidad de Veeam 2016; por ello, los requerimientos que eviten interrupciones y fallas en los sistemas son vitales para la organización.

Las empresas son cada vez más vulnerables ya que la toma de decisiones requiere en todo momento de información, esto las coloca en situaciones de riesgo ante contingencias cuyo impacto se puede ver reflejado económicamente o en la reputación con sus clientes así que, contar con mecanismos que aseguren la recuperación de la organización en caso de desastres, es indispensable.

La resiliencia en las empresas se remite a su capacidad para afrontar situaciones de crisis y ser capaz de activar mecanismos que le ayuden a recuperarse y volver a operar de manera normal en el menor tiempo posible. Para ser una Empresa Permanentemente Activa (Always-On Enterprise) es indispensable que esa capacidad de recuperación sea en lapsos de tiempo prácticamente imperceptibles para clientes y usuarios y es que nadie está exento de sufrir un percance. De aquí la relevancia del Plan de Recuperación de Desastres (DRP, por sus siglas en inglés).

Un DRP tiene como objetivo que la empresa pueda reaccionar ante una contingencia o falla, éste se compone de una serie de actividades que se ejecutan para reestablecer las operaciones del negocio, así como los servicios, procesos y aplicaciones de misión crítica, reduciendo al mínimo el impacto económico. El costo asociado a la pérdida de información y al tiempo fuera de servicio, es lo que determinará las actividades que conformarán el  DRP de la organización para cumplir con el RPO y RTO (Objetivos de Punto de Recuperación y Objetivos de Tiempo de Recuperación) necesario para minimizar las pérdidas.

Es tal la relevancia de contar con un DRP que se está convirtiendo en un tema del checklist, ya sea que se cuente con la infraestructura o que se contrate como servicio (Recuperación de Desastres como Servicio: DraaS). El reporte también muestra que en México 40% de los CIOs encuestados actualmente ya está inviertiendo en DraaS, mientras que 33% planea hacerlo pronto.                                                                  

Los beneficios brinda la Recuperación de Desastres como Servicio en cuatro puntos:

·         Tecnología más alcanzable que genera una mayor adopción. A medida que la tecnología mejora, las funcionalidades aumentan y los costos y curvas de aprendizaje disminuyen, la adopción de DRaaS va creciendo rápidamente para las empresas de todos los tamaños y a precios más accesibles (no es necesario tener infraestructura propia).

·         Facilidad de implementación y uso. Implementar DRaaS facilita la recuperación de cualquier dato, aplicaciones y hasta máquinas virtuales a través de un proceso que se ha simplificado (lo administra un tercero).

·         Velocidad en la recuperación. Recuperación en pocos minutos en el caso de desastres, en lugar de horas o incluso días. Disminuyendo así los tiempos inactivos, mejorando la eficiencia y aprovechamiento de recursos dentro de las organizaciones.

·         Aprovechamiento de la nube. Otra beneficio es que los datos que se desean proteger ya están almacenados en la nube, por lo que restaurar el sitio virtual de DR es una operación mucho más rápida y segura (Regla 3-2-1).

El mercado ofrece soluciones y herramientas tecnológicas que garantizan total disponibilidad al permitir a las empresas tener una buena resiliencia ante contingencias, enfrentar los obstáculos que se les presenten y lograr recuperarse de desastres exitosamente, al continuar la operación de manera normal, manteniendo así, la competitividad en la era del Always-On-Enterprise.