La congestión nasal crónica, por ejemplo, puede interrumpir el sueño, generar irritabilidad y empeorar los síntomas de ansiedad y depresión.
En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, destacamos el bienestar integral de las personas y es importante resaltar la importancia de una correcta respiración para promover no solo el bienestar físico, sino también el equilibrio mental y emocional.
El bienestar mental está estrechamente ligado a la salud física. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los trastornos respiratorios no solo afectan el cuerpo, sino que también tienen un impacto directo sobre el estado de ánimo y la salud mental. La congestión nasal crónica, por ejemplo, puede interrumpir el sueño, generar irritabilidad y empeorar los síntomas de ansiedad y depresión. La respiración libre y adecuada no solo oxigena mejor el cuerpo, sino que también mejora el rendimiento cognitivo y el manejo del estrés.
La conexión entre la respiración y la salud mental
Numerosos estudios científicos han mostrado que una respiración adecuada mejora la función cerebral. Sugieren que el control de la respiración puede reducir significativamente los niveles de cortisol, la hormona del estrés, y contribuir a una mayor relajación y bienestar mental. Sin embargo, para maximizar estos beneficios, es fundamental que las vías respiratorias estén despejadas.
Un enfoque basado en la ciencia para el bienestar respiratorio y mental
A través de estudios realizados en hospitales y centros médicos, se ha comprobado que el uso regular de soluciones de agua de mar como Stérimar mejoran la calidad de vida de pacientes con rinitis, sinusitis y otras infecciones respiratorias, promoviendo un estado de bienestar general.
Con nuestra fórmula a base de agua de mar 100% natural, está probado que ayudamos a descongestionar las vías respiratorias, mejorar la respiración nasal y contribuir a una mejor oxigenación del cerebro. Este incremento en la oxigenación puede tener un efecto positivo en la claridad mental, la concentración y la reducción de los niveles de ansiedad, como han señalado diversos estudios científicos.