Addictware | Noticias de Tecnología - De la historia aprendemos dos cosas

Pagar servicios usando criptomonedas, confiar más en la Inteligencia Artificial para que apoye en las actividades diarias, y sobre todo en que proteja nuestra misma información de ataques cada vez más complejos y agresivos. Es solo cuestión de tiempo para que estos procesos de adopción se vuelvan un factor denominador en la forma en que se conduce el mundo hoy día.

Cylance logoCambiar es sinónimo de crecimiento y aprendizaje, adaptarse, comprender y evolucionar a la par de las circunstancias. En teoría este acto en sí debería ser simple, pero no lo es. En la historia de la tecnología nos hemos encontrado con momentos tales en que los avances han crecido a pasos raudos, generando momentos de incertidumbre ante nuevas tendencias.

Recientemente hemos visto este momento en la transición natural de dispositivos de almacenamiento (De USB’s a la Nube y de ahí al Internet de las cosas). Esta evolución por medios más mediatos, veloces y prácticos es una situación común que ocurre en toda industria, la mejora de los procesos y las tecnologías en pos del bien común. Hoy día incluso podríamos pensar en que los próximos disruptores son la Inteligencia Artificial y las tecnologías basadas en blockchain, como es el caso de las criptomonedas, para distintos fines.

A pesar de que ambas tecnologías manejan enfoques dispares en cuanto a sus ofertas tienen algo demasiado en común, y es que la novedad de su naturaleza ofusca la comprensión de sus capacidades. En el campo de la inteligencia artificial vemos una plétora de dispositivos inteligentes, de sistemas que cuentan con aprendizaje de máquinas, pero el enfoque de seguridad utilizando la Inteligencia como eje ha generado una especie de resilisencia ante la adopción de esta; en el caso de las criptomonedas, su adopción y comprensión por parte de diversos sectores ha sido lento, y complejo. En términos básicos, las propuestas que se atreven a cambiar el panorama resultan más difíciles de integrarse a la actividad diaria, a pesar de que se compruebe su eficacia y versatilidad.

Y este escenario lo hemos visto en repetidas ocasiones, cada vez que surgen nuevas tendencias en cualquier ámbito se puede respirar miedo y escrutinio ante un panorama prometedor, pero a la vez incierto. ¿Qué le hará esta propuesta a un mercado ya establecido?, ¿existirá cuota de mercado ante este nuevo panorama?, ¿cómo podemos adaptarnos?, preguntas que surgen debido a un desconocimiento justificado de la novedad, prefiriendo una solución o proveedor tradicional, en vez de aquel que puede cuestionar o modificar por completo el panorama.

No es necesario vender la idea de que con las nuevas propuestas tecnológicas existe un cambio tangible, ya que la historia nos ha demostrado que cada que existe una nueva tecnología o metodología, con el paso del tiempo se aumenta la adopción y por ende la comprensión de las capacidades de lo ofertado. En últimas fechas lo hemos visto con el incremento de plataformas de negocio enfocadas al transporte, o con la adopción de negocios y empresas que en sus opciones de pago utilizan criptomonedas.

Las nuevas tecnologías, han sido capaces de integrarse en las actividades de las personas por medio de una adopción paulatina y, sobre todo efectiva. Por nombrar algunos ejemplos; las plataformas de Google que cada vez se tornan más exactas; comenzamos a confiar más en los mapas, en sus resultados de búsqueda, cualesquiera que sean, apoyándonos ciegamente en su capacidad de respuesta, o ¿qué me dice de los algoritmos de adivinación de gustos tanto musicales o de video que plataformas como Spotify, o Netflix ofrecen? Pero eso ya es parte de nuestra cotidianeidad, actualmente distintas tecnologías están siendo usadas de nuevas maneras, hemos visto jugadores profesionales de soccer ser fichados con Bitcoins[1], tiendas que carecen de filas y que operan con aprendizaje de máquinas[2], algo que tan sólo hace un par de años sonaría a un irracional. Esta evolución de uso de las tecnologías derivará en que, en un futuro, dichas propuestas serán parte de la actividad común de sus usuarios.

Pagar servicios usando criptomonedas, confiar más en la Inteligencia Artificial para que nos apoye en nuestras actividades diarias, y sobre todo en que proteja nuestra misma información de ataques cada vez más complejos y agresivos. Es solo cuestión de tiempo para que estos procesos de adopción se vuelvan un factor denominador en la forma en que se conduce el mundo hoy día.

Usted, ¿qué tan pronto desea adoptar nuevas tendencias?, en un mundo que aprende de forma veloz los nuevos métodos, es primordial estar a la vanguardia y ser parte del grupo de pioneros que intentaron algo nuevo en pos de cambiar el mundo.